Según el Banco Central, las compras de divisas fue la más alta de las últimas 8 elecciones

Según un informe presentado por el vicepresidente del Banco Central Vladimir Werning, la demanda de dólares de personas y empresas antes de las elecciones legislativas del 26 de octubre pasado fue la más alta de las últimas ocho elecciones nacionales. El 40% de los pesos en circulación fueron a comprar divisas o conseguir cobertura cambiaria.

El Gobierno llegó a las elecciones con un “dólar barato” como ancla para la inflación, su “caballito de batalla” electoral. Para ello, Milei y Caputo quemaron los dólares del blanqueo de capitales, los superávits comerciales, el préstamo del FMI, el adelanto de las cerealeras con retenciones cero y hasta intervino el Tesoro de EEUU.

Te puede interesar: Con las reservas en rojo, el Gobierno afronta pagos de intereses millonarios al FMI

Los mercados festejaron la victoria de Milei y se dispararon las acciones y bonos. El precio de la divisa, en tanto tras amagar con un desplome al inicio de la jornada terminó volviendo a niveles cercanos a la banda cambiaria superior, dejando en evidencia las vulnerabilidades de un Gobierno que no logra acumular reservas, más bien todo lo contrario.

La presión cambiaria fue producto de la política del Gobierno que propició la timba financiera y la desregulación para la salida de capitales. Luego del acuerdo con el FMI, el mismo Gobierno levantó su propia medida de establecimiento de los capitales de “inversores no residentes” a permanecer al menos 6 meses y profundizó los beneficios del carry trade garantizando su salida.

Según el informe del Central, estimó que, en los seis meses previos a la elección, la compra de dólares y la demanda de instrumentos de cobertura cambiaria -que no fueron especificados pero que podría incluir desde dólar futuro hasta bonos atados al tipo de cambio- orilló los u$s 25.000 millones.

En los 6 meses previos de la elección presidencial de 2023, la compra de divisas había sido de alrededor de u$s 15.000 millones. Si se toma en cuenta los 12 meses previos, la dolarización de ahorros y carteras sumó más de U$S 35.000 millones.

Un informe del Mirador de la actualidad del trabajo y la economía (MATE), desde que comenzó el gobierno se acumularon reservas por 15.720 millones de dólares gracias a un “fuerte incremento del endeudamiento público y privado.” Sin embargo, la fuga de excedentes fue “el principal mecanismo de pérdida de divisas”.

Como afirman Schoor, Cantamutto y Wainer, en “Con exportar más no alcanza” (Siglo XXI), la economía argentina es un “balde rajado” de sangría de divisas. Milei, con la libertad a los especuladores y la timba financiera, la desregulación para las transnacionales y apertura de capitales agrandó la rajadura.

Para cortar con el saqueo es necesario desconocer la estafa de la deuda. No hay salida posible mientras se siga pagando esta deuda odiosa. Tampoco sin romper con el régimen del FMI y sus planes de reformas anti obreras, como la laboral que implica un plan de guerra contra los trabajadores y trabajadoras. El desconocimiento soberano de la deuda, una decisión acompañada por la movilización obrera y popular.

Te puede interesar: Republic of Argentina: el rumbo económico tras el triunfo electoral

Más Noticias

Noticias
Relacionadas