Darío Barassi se volvió loco en Ahora Caigo: le tapó la cara a una participante y amenazó con irse

En una nueva emisión de Ahora Caigo, el carismático conductor Darío Barassi protagonizó un momento desopilante cuando decidió abandonar el estudio y dirigirse hacia la tribuna para interactuar con un familiar de una concursante. El episodio descolocó a todos los presentes y se convirtió en uno de los pasajes más comentados del programa.

El disparador fue la respuesta de una participante al mencionar que su pareja se encontraba en la tribuna. En ese instante, el conductor no dudó en levantarse y caminar hacia él. “No puedo hacer el programa”, expresó entre risas mientras le tapaba el rostro con una bolsa negra, generando carcajadas en el público y los concursantes.

La situación se volvió aún más divertida cuando otra mujer del público intervino para remarcar la apariencia del joven. El presentador, sin perder el hilo de su humor característico, le retrucó: “No, mi amor, mirá lo que es. ¿Es tu hijo o tu yerno?”. La respuesta de la señora no tardó en llegar: “No, es mi yerno. La hermosa que está en el medio es mi hija”.

Entre risas, Barassi concluyó con un comentario fiel a su estilo: “No, tu hija es una bomba, pero por qué… Tapate la cara, que es muy fuerte, por favor”. La espontaneidad del conductor y la complicidad del público hicieron que el momento quedara grabado como uno de los más divertidos de la jornada.

Pero las sorpresas no terminaron allí. Minutos más tarde, un concursante llamado Tomás captó la atención del conductor al lucir colgando un pequeño objeto verde. Intrigado, el humorista preguntó de qué se trataba y recibió una respuesta inesperada: “Es una nanocard. Un accesorio cuántico. Tiene nanotecnología”.

El participante explicó que se trataba de un dispositivo pensado para repeler radiaciones de las pantallas y aportar bienestar. “Nosotros a simple vista no lo vemos, pero es como una especie de escudo”, señaló. Con su ironía habitual, Barassi le reprochó entre risas no haber traído una para él, dado que en el programa abundan las pantallas. La ocurrencia de Tomás cerró el intercambio con humor: “Mi madre vende”.

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