La detención en Asunción en un departamento del Tierra Alta Del Maestro, un edificio que cuenta con gimnasio, pileta, quincho y un salón climatizado, le impide a Edgardo Kueider estar en contacto con su primer nieto. Se llama Pedro y tiene apenas unos meses. Nació poco antes de que las autoridades paraguayas detuvieran a su abuelo en el Puente de la Amistad, intentando ingresar desde Brasil con más de USD 200 mil no declarados.
Pedro es fruto de la relación entre Haidar Kueider y Brenda Ullman Herffling.
Haidar es socio de su padre en Edekom, una de las empresas que está en la mira de la jueza federal de San Isidro Sandra Arroyo Salgado. La firma fue registrada en los rubros publicidad y asesoramiento informático. En los allanamientos ordenados por la magistrada, no se encontraron rastros de funcionamiento en ninguno de los dos domicilios declarados: Cerrito 1320 Piso 7 “C” y Belgrano 1217.
Edekom se creó en 2022. Ese año, Haidar Kueider figuraba como contratado de obra en la Cámara de Diputados de Entre Ríos, según indica el sitio web oficial. La situación se mantuvo hasta 2023. En la nómina también aparece su hermano Facundo, quien actualmente trabaja en la Justicia entrerriana. Un alto magistrado oriundo de Concordia fue quien promovió su contratación.
Ullman Herffling está en pareja con el hijo de Kueider desde hace mucho tiempo. Esto le posibilitó un meteórico crecimiento político. Primero fue secretaria de la Juventud durante la gobernación de Gustavo Bordet, cuando Edgardo Kueider manejaba los hilos del poder en la provincia. En 2023, ya desde la banca en el Senado, Kueider la colocó como candidata a diputada nacional. Fue en el cuarto lugar de la lista, que era encabezada por el ex gobernador entrerriano.
Haidar y Facundo son dos de los cinco hijos de Kueider. Ambos son frutos del primer matrimonio del ex senador. Con su segunda esposa, Liliana Di Lello, tiene otros dos, menores de edad. En Concordia comentan que los chicos redujeron sus actividades sociales cuando su padre fue detenido en Paraguay.
Mientras tanto, el proceso de expulsión de Kueider del peronismo sigue firme. Días atrás, el Consejo Provincial mantuvo un encuentro vía Zoom con todas las departamentales de la provincia. Hubo unanimidad en avalar la decisión de expulsar al ex senador que tomaron las autoridades provinciales tras la explosión del escándalo.
Ahora, el Consejo Provincial está recibiendo formalmente las notas de adhesión a la definición. Cuando reúna todo ese material, notificará en forma fehaciente a Kueider de que ha sido echado del Justicialismo.
Una vez que se cumpla esta etapa, hay divergencias en el peronismo entrerriano de cuáles tienen que ser los siguientes pasos. Un sector más formalista entiende que la decisión del Consejo debe ser refrendada durante una sesión Congreso partidario. El ala política, en tanto, asegura que esto no es necesario. Y enarbola que el Congreso provincial de septiembre ya había facultado al Consejo para avanzar en una sanción a Kueider.
El ex senador podrá apearse en formalismos a fin de cuestionar su expulsión. Pero no tiene plafón político para hacerlo. Nadie en el peronismo está dispuesto a inmolarse en su defensa.
Kueider fue detenido a principios de diciembre en el Puente de la Amistad que une Foz do Iguazú (Brasil) y Ciudad del Este (Paraguay). Trasladaba USD 211.102 en efectivo, $646.000, y 3,9 millones de guaraníes (unos USD 500 aproximadamente). Iba acompañado de su secretaria, Iara Guinsel, una mujer de 34 años oriunda de Concordia como él.
No era la primera vez que viajaban juntos a Paraguay. Tal como reveló Infobae con documentos oficiales, Kueider hizo seis viajes a ese país en lo que va del año. En cinco de esos cruces coincidió con la joven: el 13 de octubre, el 16 y 21 de junio, y el 3 de marzo.