El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC, por sus siglas en inglés) monitorea de cerca la tormenta tropical Milton, que se desplaza hacia el noroeste en el mar Caribe y se espera que impacte sobre Florida en forma de huracán.
Las autoridades emitieron distintas alertas de marejadas ciclónicas potencialmente mortales, vientos dañinos e inundaciones en varias zonas de Florida y el Golfo de México.
Según su trayectoria, Milton podría causar nuevos daños en áreas de la costa de Florida que todavía se reponen del paso de Helene, que el 26 de septiembre tocó tierra como un poderoso huracán de categoría 4 con vientos de 225 km/h.
Se esperan fuertes lluvias a nivel local en toda Florida. La península y los Cayos se encuentran muy por delante de la tormenta que se intensifica a medida que aumenta la humedad.
Para este domingo se espera que Milton se convierta en huracán categoría 1. Sin embargo, el lunes 7 de octubre, amanecerá en categoría 2 y se intensificará la noche de ese mismo día, para convertirse en un potente huracán de categoría 3, mientras avanza hacia Florida.
La presión sobre el este del Golfo de México ayuda a concentrar áreas de fuertes lluvias y tormentas eléctricas el domingo y el lunes.
De acuerdo a las previsiones del sitio Zoom Earth, después de impactar en Florida el próximo miércoles, muy cerca de Tampa Bay, el ciclón atravesará parte del estado y seguirá hasta el norte.
Las amenazas y alertas sobre Florida
Las amenazas principales incluyen vientos destructivos y fuertes lluvias. Se pronostican marejadas ciclónicas en la región y podrían representar una amenaza significativa para la vida debido a las inundaciones en las zonas costeras, advirtió el NHC.
Las lluvias intensas también representan una gran amenaza. En el sureste de Estados Unidos, las acumulaciones de entre siete y 12 centímetros de lluvia, con posibles totales de hasta 25 centímetros, podrían desencadenar inundaciones repentinas y urbanas, lo que representa un alto riesgo.
En el océano Atlántico avanza el huracán Kirk, se desplaza a una velocidad de 17 kilómetros por hora en dirección hacia la costa este de EE.UU. Sin embargo, en su recorrido se prevé que haga un leve giro hacia el norte y luego otro hacia el noreste durante este domingo, por lo que el ciclón tropical no tocaría tierra en suelo estadounidense.
“A medida que Kirk se desplace sobre aguas más frías y hacia un entorno más baroclínico, se espera que pierda características tropicales y pase a ser un fuerte ciclón extratropical hacia las 96 h sobre el noreste del Atlántico”, detalló el NHC.
LA NACION