En los últimos siete meses el costo de vida de los adultos mayores se incrementó un 54,37%.
El encarecimiento del costo de vida de los jubilados se continúa profundizando y la canasta básica del sector ya alcanza los $912.584, de acuerdo a un relevamiento elaborado por la Defensoría de la Tercera Edad.
El monto requerido por los adultos mayores para cubrir sus necesidades básicas es tres veces más que el haber mínimo, que en septiembre alcanza los $234.540,23 (más el bono de $70.000). Esta sangría afecta a cuatro millones y medio de jubilados que perciben el ingreso básico.
Con respecto a un año atrás, el valor de la canasta básica pasó de $313.185 a $685.041 en abril pasado y ahora a $912.584. De esta manera, queda reflejado que en los últimos siete meses el costo de vida de las personas mayores se incrementó 54,37%.
El estudio reveló que entre los rubros que implican mayores erogaciones están el gasto en Alimentos, que representó el 26% del total de la canasta básica ($236.873), seguido por el de Vivienda con el 22% ($198.000) y el de Medicamentos, con el 16% ($145.268).
Alimentos $ 236.873
Limpieza $ 101.443
Medicamentos $ 145.268
Vivienda $ 198.000
Transporte $ 55.000
Vestimenta $ 35.000
Recreación $ 58.000
Servicios $ 83.000
Total: $ 912.584
Al analizar las cifras, el Defensor del Pueblo de la Tercera Edad, Eugenio Semino, sostuvo que es «una historia que se repite”, señalando que “los nuevos datos de la Canasta Básica de los Jubilados ratifican la situación de precariedad y miseria en la que se hunde cada vez más el sector».
Asimismo, criticó el otorgamiento de las compensaciones mensuales que hace el Gobierno indicando que “el intento de mitigar el problema mediante el anuncio de bonos que son como monedas arrojadas a un pueblo hambriento no solamente son inútiles sino también contraproducentes”, y aseguró que “son parches que resaltan el agujero que quieren ocultar”.
Ante este panorama, Semino consideró que “no es que los jubilados sigan estando mal, es que están cada vez peor y no hay perspectivas de que la situación se revierta”, expresando que “son siete millones de jubilados y jubiladas, ¿cómo puede salir adelante un país cuyo Estado hunde directamente en la pobreza a más del diez por ciento de su población? La deuda sigue siendo con ellos”.
Fuente: NA