El hijo del Diez habló con un destacado medio italiano y contó qué era lo que anhelaba el astro argentino que nunca pudo lograr.
Diego Maradona Junior tiene el mismo cuerpo, pelo negro y rizado como su padre. En una reciente entrevista con un medio italiano, compartió unas palabras que el astro argentino le dijo. “Me contó que yo era igual a él”. Y, además, Diego Jr. aprovechó ese momento para revelar un sueño secreto de Diego: su cuenta pendiente y su anhelo como entrenador.
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Diego Maradona Junior hizo una confesión para Corriere della Sera, que conmueve hasta lo más profundo del corazón. “Ver a sus cinco hijos sentados en la misma mesa”, contó. Y, en ese sentido, agregó que el otro sueño del oriundo de Villa Fiorito era entrenar al Napoli.
Los recuerdos de Diego Junior que tiene de su padre
Diego Maradona Junior creció sabiendo quién era su padre, gracias a la sinceridad de su madre, Cristiana Sinagra, pero también vivió su ausencia y el rechazo. “Sí, era mi padre. Siempre incluso cuando no lo era, incluso cuando me sentía abandonado, rechazado. Incluso cuando extrañaba todo lo que hacían los demás niños. Cuando veía a mis amigos con sus papás, las obras de teatro, los trabajos y yo siempre y solo estaba con mamá y abuelo”, recordó Junior.
La relación con Maradona comenzó a sanar en 2016, cuando Diego, después de varios años de silencio, lo invitó a llamarlo “papá”. “Cuando me convertí en Diego Armando Maradona tenía siete años, pero mi padre nunca se opuso a nada. Me dijo que en ese momento, era 1993, hubo circunstancias que no le permitieron hacer lo que quería. No se sentía libre y de hecho no lo era”.
El día que Diego Maradona Junior conoció a su padre
Diego Maradona Junior contó que conoció a Diego en Fiuggi, en 2003. “Estaba en un partido de golf. Tenía 17 años, salí de Nápoles con mi tío, llegué al club, logré entrar saltando la valla por un agujero y desde lejos me hizo una señal para que me acercara. No fue grosero, me dio un número de teléfono, pero nadie me respondió”, contó.
Cuando finalmente se encontraron, Diego enfrentó a su hijo y le expresó que sentía en aquel entonces. “Me dijo: ´Sé que eres mi hijo, pero para todos ya no puedes serlo´. Quería ser mi padre, pero un sistema que había creado a su alrededor lo obligó a decir que no. A su manera era muy cariñoso”, agregó.