Tras semanas de movimientos al alza del bitcoin, este lunes la criptomoneda abrió su cotización a US$65.500, y ya alcanza los US$66.300, lo que la posiciona US$2489 por debajo de los US$68.789, el máximo histórico que alcanzó en diciembre de 2021.
Este nuevo valor implica un avance porcentual de 194% en términos interanuales, y de 6,83% respecto de las últimas horas. La tendencia sigue proyectando la recuperación de la divisa luego de atravesar, en los últimos dos años, lo que se conoce como el “invierno cripto”. Durante este tiempo, la moneda sufrió un derrumbe en el precio, que se desplomó a US$15.000. La situación se produjo en el contexto de la crisis económica mundial, a partir de la cual se registraron altas tasas de inflación en Europa y Estados Unidos, y la invasión de Rusia a Ucrania.
Uno de los factores más relevantes detrás de este incremento son los movimientos que se dieron a partir de la aprobación de los ETFs al contado, fondos que cotizan en la bolsa de Estados Unidos y que permiten la inversión indirecta a las empresas que no podían hacerlo en activos digitales por su estatuto.
Ramiro Menne, especialista en educación cripto en Lemon, detalló que hoy hay más de 10 empresas financieras tradicionales que poseen un ETF de Bitcoin, y entre todas gestionan más de US$15.000 millones. “La demanda en las primeras semanas de existencia superó las expectativas del mercado. Hoy en día hay más de 745.000 BTC dentro de estos vehículos de inversión, lo cual equivale al 3,8% de todos los Bitcoin en existencia”, comentó.
El especialista agregó que, además, la suma de estos fondos generaron, en seis semanas, una presión de compra de más de 127.000 BTC, que fue equivalente a US$7000 millones, una cifra casi tres veces superior a la cantidad de Bitcoin emitida durante el mismo período.
“La presión de compra de los ETFs por el interés institucional, sumado al sentimiento positivo del mercado, hacen que la demanda supere ampliamente la oferta, y que por esto suba el precio. De hecho, desde la aprobación BTC se apreció más de un 30%”, agregó.
También Matías Bari, CEO de Satoshi Tango, enfatizó la importancia de los fondos, que tuvieron operaciones récord en estos meses. De hecho, consideró que este fue el principal factor que incrementó el valor de la criptodivisa. “Si comparamos las operaciones o el interés del inversor común, de las personas ‘normales’ y no de las empresas, este se queda corto frente al interés que generan los ETFs. Las búsquedas en Google o en YouTube relacionadas a Bitcoin no se han incrementado, por lo que podemos decir que estos instrumentos fueron muy influyentes en la subida”, explicó.
Sin embargo, advirtió: “Luego de estas subas repentinas suele venir una corrección en el precio del activo, por lo que es posible que comience a bajar hasta encontrar lo que se conoce como piso o resistencia. Es decir, un precio mínimo en el que el activo se va a establecer en un momento determinado”.
También Menne se expresó en este sentido y afirmó: “Aunque la creciente adopción institucional y la cercanía del halving son noticias positivas para el mercado cripto, no es una garantía de que el precio de Bitcoin siga subiendo”.
Lo cierto es que el mercado cripto se caracteriza por su volatilidad. Sobre esta cuestión, Julián Colombo, director general de Bitso Argentina, especificó que los precios se manejan en ciclos, y que suelen experimentar mínimos antes del halving, el evento que recortará a la mitad la emisión de monedas y que sucede cada cuatro años, y máximos históricos luego del evento. “Sin embargo, este patrón ocurrió solo tres veces en la historia, y debido a la falta de estadísticas suficientes para respaldar estas predicciones, no podemos asegurar que se repita en el futuro”, dijo el especialista.
Los factores que influyen en la cotización de la divisa son varios y es difícil predecir los próximos movimientos, pero Colombo aseguró que en el ambiente hay optimismo: “A pesar de la incertidumbre, mantenemos la confianza en la continua adopción masiva de Bitcoin, lo que probablemente dará como resultado un aumento de su precio a largo plazo. No obstante, no sería prudente hacer pronósticos específicos sobre su comportamiento a corto plazo. Sí, podemos observar un renovado interés en el trading entre los usuarios de Bitso, lo que refleja un crecimiento potencial en este mercado”, concluyó.