El periodista Adrián Ventura sufrió un violento robo cuando circulaba con su bicicleta por el barrio porteño de Retiro. El conductor de la señal TN fue abordado por dos motochorros que lo atacaron y lo empujaron con violencia del rodado. Como la víctima iba a mucha velocidad, cayó con dureza sobre el asfalto. “Me golpeé muy mal. El golpe fue fatal”, contó este domingo en su programa televisivo. Los delincuentes se hicieron de su bicicleta para emprender la huida y la víctima tuvo que ser atendida en un sanatorio debido a las importantes lesiones que recibió en su cuerpo, sobre todo en una de sus manos.
“No me fracturé nada, pero también tuve suerte porque no pasó un camión o un auto atrás mío, si no me pasaban por arriba. Todo ocurrió en el medio de la avenida, ahí en Retiro”, relató Ventura. Contó además que tuvo que caminar 200 metros hasta que halló un patrullero de la Policía de la Ciudad.
Intervino en el hecho personal de la Comisaría Vecinal 1A y la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional 24, a cargo de Marcelo Retes, quien dispuso que se labren actuaciones en una causa caratulada como “robo”.
En diálogo con LA NACION, Ventura detalló cómo fue el robo: “Yo circulaba por la Avenida Ramón Castillo, venía en una bici rutera a alta velocidad. Me pasan dos chicos en una moto de alta cilindrada. Se baja el que venía atrás, cruza la calle y se me tira encima”.
“No fue que me dijo frená, ni que me amenazó. Se me vino encima y me empujó a la altura del pecho y me tiró al piso con fuerza. Yo salí despedido y la bici quedó en medio de la calle”, sumó el periodista sobre el hecho que ocurrió en una zona en la que habitualmente no suele utilizar para entrenar ciclismo”.
Ventura sumó: “Cuando yo caí, agarraron la bici. Uno se fue en la moto y otro en la bici y desaparecieron en segundos. No había nadie a esa hora en el lugar. Ni vehículos que pasaran, ni efectivos de la policía”.
Sobre su estado de salud, contó: “No pude mover el brazo por una hora. Pensé que me lo había quebrado. Por suerte fue solo el golpe. Yo caí de costado, así que lo que más me golpeé fue el hombro, que lo tengo todo negro y la cadera. Iba con el casco, pero por la velocidad que llevaba y del golpe, si chocaba la cabeza con el cordón me hubiese afectado igual”.
“Lo que más me sorprendió es el desprecio por la vida que tienen en su accionar. Sé que fue al voleo. Pero no les importó nada. Si yo me moría por el golpe o me quebraba la cadera o me pasaba un auto por encima, a ellos no les importaba nada. Para ellos la vida del otro no vale nada”, reflexionó el periodista.
Ante la consulta de si fue contactado por autoridades de la Ciudad, dijo que lo llamó el jefe de Gobierno, Jorge Macri y el ministro de Seguridad, Waldo Wolff. “Me dijeron qué es lo que están haciendo para mejorar el tema de la seguridad. Pero, hoy por hoy, no sé si es un tema de la policía o si es un tema de los jueces garantistas que no se animan a dejar presas a estas personas”.
Sobre este punto, fuentes de la nueva administración porteña, detallaron: “En los dos primeros meses de gestión hubo 4904 detenidos -82 por día-. De ese total, fueron liberados 2680. Es decir, cerca de 6 de cada 10 detenidos, así como entraron, fueron puestos en libertad. La Justicia tiene que parar con la puerta giratoria. Hay que dar la discusión sobre la ley de reiterancia”.
LA NACION